09.09.2020 | Química y lifestyle
¿A qué huele el mar? Compuestos químicos del olor a mar
El verano va llegando a su fin, pero hay un detalle que se quedará con nosotros hasta el próximo año. No es el bronceado, que desaparecerá paulatinamente, ni los bañadores y bikinis, que acabarán en el fondo del armario hasta el siguiente verano. Una vez más la química ha hecho su magia para que el olor a mar, inconfundible perfume salado, llegue a nuestras fosas nasales y lo recordemos a pesar de haber dejado muy lejos la playa.
A pesar de ser un aroma inconfundible, quizás no sepas describir exactamente a qué huele el mar. ¿Huele a algas? ¿A pescado? ¿Es olor a salitre? El olor a mar es difícil de describir porque es el resultado de combinar muchos compuestos químicos.
Propiedades químicas del mar
En el mar encontramos una gran variedad de elementos químicos, desde el cloro y el sodio (que juntos forman la fórmula de la sal marina) hasta azufre, magnesio o incluso trazas de algunos elementos menos comunes como el oro. Algunos de estos son los que, al combinarse, forman los compuestos químicos del olor a mar.
Componentes químicos del olor a mar: el dimetilsulfuro
En la complicada fórmula del olor a mar destaca el provocado por el dimetilsulfuro, un compuesto químico del agua de mar generado por algunas bacterias que se alimentan de fitoplancton. Este, a su vez, es el responsable de producir el precursor del sulfuro de dimetilo, el dimetilsulfoniopropionato. Cuando las bacterias se alimentan de las algas unicelulares ricas en este compuesto químico lo descomponen en dimetilsulfuro en estado gaseoso. Se trata de un compuesto muy volátil que pasa rápidamente a la atmósfera y, por lo tanto, a nuestras fosas nasales.
Los seres humanos somos muy sensibles al sulfuro de dimetilo y notamos su olor aunque haya muy poca cantidad de este compuesto químico en el ambiente. De hecho, debido a esta gran sensibilidad hacia el dimetilsulfuro, este compuesto químico se suele añadir a los gases peligrosos inodoros con tal de que, si hubiera alguna fuga, la detectáramos rápidamente.
Sin embargo, no somos los únicos con este talento. Las aves marinas también son capaces de detectar velozmente el olor a dimetilsulfuro. De este modo, gracias al olfato logran identificar rápidamente los lugares ricos en plancton y, por lo tanto, en su manjar favorito: ¡peces!
El dimetilsulfuro y el calentamiento global
Además de deleitarnos a través del aroma y hacer de guía gastronómico para las gaviotas, el dimetilsulfuro cumple otras funciones. Por ejemplo, destaca su papel en mantener unas condiciones climatológicas adecuadas. Como te imaginarás, el mar está continuamente liberando este compuesto químico que, al llegar a la atmósfera, se oxida y se condensa, estimulando la formación de nubes que, a su vez, favorecen las precipitaciones. Por esta razón, algunas teorías apuntan a que el dimetilsulfuro, el principal compuesto químico del agua de mar, actúa como regulador climático y ayuda a frenar el calentamiento global.
Química del agua de mar: otros compuestos químicos del olor a mar
Como habíamos comentado, la composición química del mar es muy rica y variada. Hay otros compuestos químicos que, aunque no de forma tan intensa como el dimetilsulfuro, contribuyen al olor a mar.
- Los bromofenoles
Si de alguna no hay duda es que el olor a mar nos recuerda al del pescado. ¿Sabes a qué se debe su inconfundible olor? De nuevo tiene que ver con los compuestos químicos: concretamente con los bromofenoles. Los bromofenoles no son producidos por los propios peces, sino que los adquieren a través de la alimentación, sobre todo algas y gusanos marinos que sintetizan bromo.
- Las dictiopteronas
Volvemos a las algas para hablar de otro compuesto químico que influye en el olor a mar. Las algas generan dictiopteronas, compuestos químicos utilizados como feromonas. Es decir, se trata de señales químicas que a través del olfato facilitan la reproducción, guiando al esperma hasta los huevos.
- El ácido sulfhídrico
También debemos a las algas otra nota muy característica del olor a mar. En esta ocasión tiene que ver con la descomposición de las algas y los compuestos químicos que generan. Cuando mueren, la marea arrastra las algas hasta la orilla del mar, donde se acumulan y descomponen, generando ácido sulfhídrico.
Este olor no es precisamente agradable. De hecho, quien lo ha notado lo describe como “olor a huevos podridos”. Pero, como siempre decimos, la clave está en la fórmula y en el olor a mar no podía ser diferente. ¿Hay alguien a quien no le encante el olor a playa?